El 14 de junio de cada año se celebra el Día Mundial del Donante de Sangre para agradecer a los donantes voluntarios no remunerados y concienciar de la necesidad de hacer donaciones regulares para garantizar la calidad, seguridad y disponibilidad de sangre y sus productos.
El Día Mundial del Donante de Sangre se celebra cada 14 de junio en todo el mundo para poner de relieve las actividades mundiales, nacionales y locales, recordando la fecha de nacimiento del austríaco Dr. Karl Landsteiner, quien descubrió los grupos sanguíneos y fue distinguido con el Premio Nobel de Medicina en año 1930.
Este año 2024, el lema de la Organización Mundial de la Salud (OMS) es “20 años celebrando la generosidad: ¡Muchas gracias, donantes de sangre!” en una campaña donde se busca dar las gracias a las personas de todo el mundo que salvan vidas con sus donaciones, a la vez que plantea un llamado a la acción para motivar a que más personas se unan al movimiento mundial de donación de sangre.
Las transfusiones de sangre y sus productos ayudan a salvar millones de vidas al año. Contribuyen a que pacientes con enfermedades potencialmente mortales vivan más tiempo con mejor calidad de vida, y posibilitan la realización de intervenciones médicas y quirúrgicas complejas. Asimismo, tienen una función vital en la atención maternoinfantil, el embarazo y las respuestas de emergencia a los desastres naturales o causados por el hombre.
Los servicios de sangre que permiten a los pacientes acceder a sangre y productos sanguíneos seguros en cantidades suficientes son un componente clave de los sistemas de salud eficaces. Solo se puede asegurar un suministro suficiente mediante donaciones regulares voluntarias y no remuneradas. No obstante, en muchos países los servicios de sangre siguen teniendo problemas para ofrecer sangre suficiente y garantizar su calidad y seguridad.
La donación de sangre es un acto altruista para el que no hay que tener condiciones excepcionales, únicamente la conciencia de que es necesaria para alguien (o para nosotros mismos ya que 9 de cada 10 personas la necesitarán en algún momento de su vida) y las ganas de dedicarle apenas media hora. Cualquier persona con buen estado de salud, mayor de 18 años y menor de 65, y que pese más de 50 kg. puede donar sangre.
Sólo el haber padecido determinadas enfermedades (hepatitis, sida, paludismo, tumores y otras), haber estado enfermo en los días previos a la donación o haber tomado algunos medicamentos, hacen que una persona no sea candidato a donar en un momento determinado. En cualquier caso, el personal de salud que hace las colectas de sangre, hará unas pruebas y algunas preguntas para saber si el donante estás en condiciones de realizar la donación. En los casos que se lo excluya temporalmente, una vez transcurrido el período indicado, puede volver a presentarse para donar.
La Secretaría de Promoción de la Salud de la Agremiación Médica Platense se adhiere a las campañas concientizar a la sociedad sobre la necesidad de sangre y de que muchas más personas en el mundo se conviertan en donantes voluntarios de sangre.
"Comprometida con la promoción y protección de la salud y con la defensa del Trabajo Médico"